El barrio Tinyajcucho, en el distrito de Masma, que venera a la Santísima Cruz en mayo, hizo realidad el templo que soñaron hace muchos años con el aporte de los pobladores e hijos residentes en la capital de la República.
La inauguración contó con la presencia del arzobispo metropolitano de Huancayo, monseñor Pedro Ricardo Barreto Jimeno, quien dijo que la capilla es una bendición de Dios, en medio de la maravilla del paisaje masmino.
Destacó la decisión de hacer posible una casa para Dios que reunirá a la familia en los sacramentos y estará al servicio de todos, con un sentido ecuménico y de servicio.
Felicitó la unidad de los pobladores en este proyecto que buscará el bien común y fortalecerá la fe en un marco de solidaridad y de objetivos comunes, especialmente a favor de los que menos tienen.
El padre Percy Castillo Vílchez, párroco de la parroquia Santo Toribio de Mogrovejo de Yauyos, encargado de esta jurisdicción, manifestó que habrá una mayor y mejor atención con la misa y los sacramentos.
Durante el acto se bendijeron las imágenes que donaron los fiels, entre ellas, del Señor de los Milagros y del Señor de Muruhuay, con sus respectivos padrinos.
Esta capilla se hizo posible con el apoyo de familias como Salas Llallico, Moya, Ojeda, Solís, Benito, entre muchas otras, informó el presidente pro capilla, Walter Solís Núñez.
Así como este barrio, hay otros en el valle del Mantaro que hacen realidad templos para orar y recibir los sacramentos, mediante el aporte y la realización de diferentes actividades pro fondos.