Parroquia “San Miguel Arcángel” – Huaripampa

Parroquia “San Miguel Arcángel”

Sacerdote

Párroco: Pbro. Gustavo Galvez Campero, PES

Vicarios: Pbro. Carlos Enrique Leon Toro. PES

Dirección

Plaza de Huaripampa – Jauja

Oficina Parroquial

HORARIO DE ATENCIÓN
LUNES A SÁBADO
Mañanas: 9 a 1 p.m.
Tardes: 2 a 5 p.m.

Telefono: 994 326 076

Horarios de Misa

Siguenos en:

Pueblo Histórico De Huaripampa

El Pueblo de Huaripampa, aun conserva el típico estilo arquitectónico colonial y republicano, denominando “La Villa Hermosa de Huaripampa”, cuyas costumbres y tradiciones se encuentran íntimamente ligadas a la usanza española, como la danza del corcovado relacionado a las corridas de toros, la tunantada, la jija, las fiestas patronales en honor a las “Cruces de Mayo”, entre otros. Bruno Terreros Baldeón es reconocido como uno de los Próceres de la Independencia del Perú mediante Decreto Supremo N° 3-SGMG-18 en el gobierno de Fernando Belaunde Terry. Asimismo, los restos de Buenaventura Mendoza hoy descansan en la Cripta de los Héroes de Lima.

Huaripampa, fundado el 29 de septiembre de 1570, es uno de los primeros pueblos españoles en el valle del Mantaro y fue reconocido como capital de distrito en 1864. Originalmente habitado por los «huaris» o «jaris», fue anexado al Chinchaysuyo durante el incanato y desempeñó un papel clave en el sistema administrativo inca, con importantes almacenes en sitios arqueológicos como Quinlliyoc y Pumpunya.

Con la llegada de los españoles, Huaripampa fue establecido como una reducción de pueblos prehispánicos bajo la dirección de Jerónimo de Silva, quien fundó el pueblo bajo la advocación de San Miguel Arcángel. La iglesia, construida poco después, fue un elemento central en la vida del pueblo, sirviendo tanto como centro religioso como administrativo. Posteriormente, Huaripampa fue organizado como una parroquia o doctrina con amplios territorios, limitados al norte con Pachacayo, al sur con Mito, al este con el río Mantaro y al oeste con Yauyos.

Durante la independencia del Perú, la parroquia de Huaripampa jugó un papel crucial bajo el liderazgo del párroco Bruno Terreros Baldeón. Él organizó la defensa contra las fuerzas realistas, coordinando la resistencia con guerrilleros locales y participando activamente en la defensa de Chupaca y el bloqueo de Lima, facilitando la entrada del Libertador San Martín y contribuyendo a la independencia del país.

En la Guerra con Chile, el 22 de abril de 1882, el pueblo defendió valientemente su territorio en la Batalla de Huaripampa, dirigida por el clérigo Buenaventura Mendoza. A pesar de estar mal armados, los huaripampinos enfrentaron a las fuerzas chilenas con gran determinación. Mendoza, capturado tras la batalla, fue ejecutado después de proclamar «VIVA EL PERÚ», subrayando el fervor patriótico del pueblo.

Durante la guerra de resistencia posterior, Huaripampa fue testigo de la «Huaripampeada» el 15 de noviembre de 1885, una estrategia militar audaz liderada por Andrés Avelino Cáceres. Esta táctica, que incluía distracciones para el ejército del gobierno, fue crucial para forzar la dimisión del presidente Miguel Iglesias y resultó en la elección de Cáceres como presidente del Perú el 2 de diciembre de 1885.